A fines del año 2013 corrían tiempos más que difíciles en general, cada vez se sentía más la falta aire en las PyMES farmacéuticas.

Existía ya en el Colegio la Comisión de Emprendedores, y fue así que la Dra. Carina Terráneo comenzó a trabajar junto a Roberto Cáceres Nazr. Se comenzó a convocar a las farmacias comunitarias de Capital para de una vez por todas dejar de hacer catarsis y empezar a trabajar en conjunto por una farmacia comunitaria autosustentable.

En un primer momento fuimos unos pocos que fueron rotando y, poco a poco, se fueron sumando más y más farmacéuticos.

En la primera reunión de Comisión se dejó planteado que la idea era contribuir con una idea y estar mejor en este sistema, que no está en nosotros poder cambiar. ¡Y ya no más quejarse por quejarse! Con lo cual, tuvimos que jugar con las reglas de juego.

El foco de la unión de esfuerzos fue generar un grupo de farmacias que estén interconectadas para resolver situaciones laborales diarias, consultas frecuentes, dudas, inconvenientes de situaciones típicas, faltas de medicamentos. Fue así que, por medio de la tecnología, fuimos consolidando nuestra unión a través de la labor conjunta.

Por primera vez, estábamos trabajando en equipo. Un equipo de farmacias comunitarias trabajando interconectadas por el bien del paciente, por el bien de cada uno de los farmacéuticos a cargo de nuestra única oficina de farmacia en la cual nos desarrollamos como personas y como profesionales.

Creímos que era importante tener un nombre y un logo que nos identifique, y fue así que, después de varias sesiones de búsqueda y consenso entre los que en ese momento participamos, decidimos: “Red de farmacias profesionales”, con el logo que se ve en cada una de nuestras farmacias. El mismo fue registrado en marcas y patentes.

Estuvimos presentes en ExpoFarmacia de 2015 para dar a conocer la Red del Colegio de Farmacéuticos de Capital Federal, a través de un díptico que nos presentaba como grupo, farmacias integrantes, distribución de las mismas en Capital, misión, y visión.

Por pequeño que parezca, es trascendente, ya que a partir de allí fueron las distintas empresas y laboratorios quienes se acercaron para ofrecernos alternativas y apoyo a muestrea gestión.

La mayoría de las farmacias de la Red son pequeñas y medianas, con lo cual la suma de todas nos hace grandes en conjunto. Se acercaron laboratorios y entidades bancarias, en vista de brindarnos su apoyo a modo de plazos de pagos diferenciados, pero al mismo tiempo exclusivas según el perfil de cada farmacia, cursos, etc.

Logramos realizar la confección de bolsitas con el logo de la Red, lo cual constituyó simbólicamente un elemento que nos identificó a todos.

Hoy día, dado el número de farmacias ya estables que trabajan en conjunto, estamos al punto de madurez tal de lograr compras comunitarias, lo que ayudaría a mejorar la rentabilidad de las mismas. Pero en esto nos vemos limitados por cuestiones legales.

Este aspecto lo vimos superado dado que se generó una alianza estratégica con una droguería de ofertas, a la que de no haber estado en grupo jamás hubiéramos podido acceder, con descuentos más que convenientes en el ejercicio diario. Esta misma nos proveerá de bolsitas con nuestro logo y rollos fiscales.

También, se organizó un seminario-taller de seis módulos, a cargo de una empresa líder en conocimientos de frontera dictado, en forma práctica y didáctica para todos los colegiados en herramientas de gestión para la farmacia comunitaria. Contó con la asistencia de gran parte de los integrantes de la Red, así como también de otros colegiados. Esto nos sumó importantes conocimientos y herramientas de aplicación sobre los cuales hoy estamos trabajando.

Básicamente, estamos conformados en dos subcomisiones: una de disminución de costos y otra de mejora de rentabilidad. En la de mejora de rentabilidad estamos enfocados en lo explicado más arriba y, en cuanto a la reducción de costos, estamos trabajando por disminuir gastos por contrataciones en conjunto.

Es un trabajo que día a día vamos sumando a las no menos tareas diarias de nuestras oficinas de farmacia.

Lo importante de esta Red es la mutua cooperación entre los integrantes. Buscamos generar confianza entre los mismos, ser compañeros de trabajo en este difícil contexto de concentración de poder en las ya conocidas cadenas que desplazan a las farmacias comunitarias que, en inferioridad de condiciones, nos es difícil competir comercialmente.

Nuestra esencia es el servicio a la población, desarrollar la oficinas de farmacia como un centro de salud primario, el profesional de la salud más cercano a la población, presente y asesorando gratuitamente. Es a través de la comercialización de los medicamentos que existimos, y no somos formadores de precios del sistema, financiamos los medicamentos de la medicina prepaga y las obras sociales hasta 90 días, en muchos casos el 100%.

No todas realizamos preparaciones magistrales, pero las que lo hacemos nos vemos extremadamente limitadas en el arte de nuestra profesión paradójicamente.

Tenemos inspecciones de salud pública, ANMAT, SEDRONAR, Ciudad de Buenos Aires, residuos patogénicos, inscripción en ACUMAR, y la nueva trazabilidad aumenta las exigencias cada vez más, sumado al poco personal con el que podemos contar. Cada vez más trabajo, más control, menos rentabilidad. La farmacia comunitaria va en vías de extinción si no tomamos decisiones en conjunto.

Creemos que hemos dado un primer paso. Sabemos que falta, que hay mucho por hacer, pero hemos empezado a construir un nuevo modelo de farmacia sin perder la identidad, la impronta de cada barrio, de cada farmacéutico al frente de su oficina farmacéutica.

Nuestra visión es ser una Red de Farmacias Profesionales sólida, autosustentable, confiable, y perdurable.

Si sos farmacéutico dueño de tu oficina de farmacia en Capital Federal sumate. Juntos haremos el modelo de farmacia que nos represente, profesional y autosustantable.